Nuestro dentista en Vecindario nos habla en este artículo sobre los puentes dentales, una alternativa en materia de prótesis dental que es importante conocer con el objetivo de entender qué son exactamente y cuáles son sus utilidades principales.
Qué son los puentes dentales
Un puente dental es una prótesis compuesta por varias piezas, de manera que está destinado a cerrar espacios producidos por la pérdida de varias piezas dentales consecutivas, logrando así devolver tanto la funcionalidad como la estética a la boca del paciente.
Existen dos tipos de puentes dentales en función de su ubicación:
- Puente dental anterior: se trata del puente dental que se coloca en la parte frontal de la dentadura del paciente, de manera que es muy importante conseguir resultados precisos para evitar que se note, razón por la cual generalmente se utilizarán materiales cerámicos para su conformación.
- Puente dental posterior: es el puente dental que se va a colocar en la parte posterior de la dentadura, de manera que se deberá fomentar la funcionalidad por delante de la estética, razón por la cual se prioriza la resistencia fabricándolos con materiales resinosos.
Para qué se utilizan
Además de entender qué son los puentes dentales, también es muy importante estudiar las diferentes funciones que presentan:
- Mejorar la masticación del paciente.
- Ayuda a dar forma a los sonidos.
- Obtener una mejora sustancial de la estética del paciente, especialmente si el objetivo es el de restituir piezas dentales frontales tanto del maxilar como de la mandíbula.
- Evita que el resto de dientes se mueva tras la pérdida de las piezas dentales originales, lo cual puede derivar en diferentes problemas que van desde dolores hasta problemas de malposición que acaban dando lugar a una mala masticación.
En definitiva, el objetivo principal del puente dental es el de restituir la estructura natural de los maxilares del paciente, logrando de este modo mejorar tanto la estética como la funcionalidad.